Hacia las 4 de la tarde un comunicante anónimo informó al 091 que sospechaba de alguna situación irregular en el primer piso de un inmueble de la calle Castillo de Oropesa, en el distrito de San Blas, ya que desde hacía dos días escuchaba permanentes llantos de niños.

Agentes de un vehículo 'Z' se dirigieron al citado domiclio y encontraron a los cinco menores, que estaban en situación de desamparo desde hacía cuatro días. La vivienda carecía de ropa en las camas, puertas en los armarios y alimentos.

A la vista de la situación, los funcionarios trasladaron a los pequeños a un ambulatorio de la calle Hermanos García Noblejas y, una vez atendidos, les dieron tortillas y bocadillos antes de llevarles al Grupo de Menores (Grume).

Según las investigaciones realizadas por el Grume, los cinco niños son hijos de una mujer e 34 años con numerosos antecedentes, la mayor parte de ellos por tráfico de drogas. La madre convive con un hombre de 25 años, también con un amplio historial delictivo.

Los cinco menores se encuentran en estos momentos en un colegio de acogida de la Comunidad de Madrid, mientras la policía trata de localizar a la pareja que les dejó abandonados.