Se trata de los centros San Esteban, Blas de Otero, Cervantes, Henares, San Pablo, Séneca, González Berceo, Giner de los Ríos y Educación Especia, y de los institutos Rafael Alberti y Enseñanzas Medias.

El ruido impide concentrarse a los alumnos, según la FRAVM, "pudiéndose asociar el fracaso escolar en esta zona a los efectos mencionados anteriormente".

La Federación de Asociaciones de Vecinos critica en un comunicado que en la ampliación de la terminal aérea en marcha, Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) "ha carecido absolutamente de rigor informativo sobre este macroaeropuerto en proyecto".

AENA está ultimando un sistea de detección de ruidos en el entorno del aeropuerto para comprobar que las aeronaves cumplen con las rutas, alturas y velocidades establecidas, pero todavía no ha entrado en funcionamiento. Cuando entre, los aviones que no respeten las normas contra la contaminación acústica serán sancionados por Aviación Civil.