Los hechos ocurrieron en torno a las dos de la madrugada, en la calle Besolla, esquina con la avenida de Abrantes, cuando se produjo un tiroteo en el que resultaron heridas por arma de fuego cinco personas, todas ellas varones de entre 24 y 39 años.

Poco después, llegó al lugar una patrulla de la Policía Nacional y efectivos del Samur. Los facultativos atendieron a un hombre de unos treinta años, que presntaba una herida por arma de fuego en el tórax y que sufrió una parada cardiorrespiratoria mientras recibía las maniobras de estabilización. Como consecuencia de ello, los sanitarios intentaron reanimarle durante cerca de media hora, pero finalmente falleció.

Otros dos varones presentaban heridas en el tórax. Fueron estabilizados hemodinámicamente en el lugar y trasladados en ambulancias de soporte vital adaptado hasta los hospitales Doce de Octubre y Clínico, con pronóstico reservado.

Y los otro dos hombres, uno con herida por arma de fuego en el hemitórax izquierdo y otro en el omóplato derecho, fueron estabilizados hemodinámicamente y evacuados en una ambulancia de soporte vital adaptado al Doce de Octubre, con pronóstico grave.

Un portavoz de la Policía Nacional señaló a esta agencia que las hipótesis que probablemente dieron lugar al crimen fueron ajuste de cuentas o racismo.