Esta campaña, que se intensificará durante el mes de septiembre, nace a consecuenciade los resultados que se desprenden de los análisis llevados a cabo durante los dos últimos años por el Laboratorio Municipal de Higiene, en los que se ha comprobado el alto grado de incumplimiento de la legislación vigente.

Entre los análisis realizados se ha detectado, sobre todo, la presencia de edulcorantes artificiales no permitidos y un contenido en azúcar inferior al establecido legalmente.

Tan solo el 33,3% de las muestras recogidas se comercializa bajo la denominación de "golosinas líquias para congelar". Del total de muestras recogidas bajo este lema, el 16,6% presenta un contenido en azúcar inferior al 10% que la normativa exige.

Mientras, el 66,7% restante de las muestras, al venderse como "bebidas refrescantes aromatizadas", la reglamentación técnico-sanitaria permite el empleo de edulcorantes artificiales, aunque casi todas ellas incumplen la normativa por excederse en el contenido de productos conservadores como el ácido sórbico y benzoico.