Los albergues municipales ocuparon el cien por cien de sus camas ordinarias y gran parte de las que se habían habilitado con carácter de urgencia, ante la masiva afluencia de personas en busca de un lugar donde protegerse del frío.

En concreto, los mendigos ocuparon las 110 camas permanentes de los dos pabellones de Mayorales, en la Casa de Campo, más 9 de las 12 de emergencia. En San Isidro se llenaron las 269 plazas fijas, más 1de las 30 camas de emergencia, y en el Centro Don de María, ubicado en la calle Mayor, los indigentes completaron el aforo, consistente en 80 camas ordinarias, más 13 de emergencia.

Además, los albergues de la red de la Federación de Asociaciones de Centros para Inmigración y Ayuda a Marginados (FACIAM), que colaboran en la Campaña Municipal Contra el Frío, tuvieron también una afluencia considerable de gente en busca de acogida.

Así, en el centro San Juan de Dios, ubicado tras el hospital infanil San Rafael, se ocuparon 211 de las 230 plazas que tiene, y en el de San Martín de Porres sólo quedó libre una de sus 64 camas. Estos albergues no habilitan camas de emergencia por falta de espacio.

Además, un total de 101 indigentes decidieron dormir en la estación de Metro de Atocha, que suele abrise en las noches más frías que se registran a lo largo de la campaña municipal contra el frío, que esta temporada comenzó el 25 de noviembre y finalizará el 30 de marzo.

La cifra de personas que est pasada noche decidieron dormir en albergues es ligeramente inferior a la afluencia registrada en la noche más fría de Madrid, la del pasado 11 de enero, cuando estos centros registraron una ocupación de 772 indigentes.