En su opinión, este acuerdo debe recoger "una justa y suficiente financiación", que se onseguiría mediante la "creación inmediata de un fondo regional, con la aportación, por parte del Gobierno autonómico, de 20.000 millones de pesetas anuales, para garantizar a los municipios la financiación del gasto corriente derivado de las nuevas infraestructuras y equipamientos".

Explicó que esta cantidad supone un 2% del presupuesto de la Comunidad, "por lo que es viable además de necesario", y añadió que el pacto conllevaría la aprobación de una Ley de Administración Local como instrumento jurídco que permita hacer realidad el citado acuerdo y la transferencia de algunas de las competencias que el Ejecutivo recibirá próximamente a los ayuntamientos.

Con respecto a las competencias educativas, Lissavetzky defendió, como apoyo a la escuela pública, que la Comunidad asuma el 50% del coste de conservación y mantenimiento de los colegios públicos, lo que redundaría en un mayor apoyo a la educación infantil.

Asimismo, en materia de políticas activas de empleo, pidió un incremento de los Fondo de Desarrollo Regional asignados a los ayuntamientos y que la Comunidad cofinancie un 30% de los proyectos municipales para crear puestos de trabajo.

Por último, dijo que ese Pacto Local debería recoger, además, programas de fomento del deporte y la cultura, dotados de 50.000 y 30.000 millones de pesetas, respetivamente, para financiar equipamientos deportivos y culturales en los municipios pequeños durante los próximos cinco años.