La finalidad es posibilitar un descanso vacacional a familias que atienden habitualmente a algún anciano, garantizándoles que éste estará bien atendido.

Por ello, los requisitos para optar a una de estas plazas es haber cumplido 80 años o tener más de 60 y precisar asistencia para realizar las necesidades básicas, como aseo o alimentación; ser normalmente atendido por familiares u oras personas y no padecer enfermedad que requiera el ingreso en un hospital. El plazo de presentación de solicitudes finalizará el 31 de mayo.

Estas plazas de verano ofrecen alojamiento y manutención en régimen de pensión completa, en habitaciones dobles, así como la asistencia integral que corresponde a una residencia especializada. Los beneficiarios abonarán el precio público establecido.

Se confeccionará una lista de espera para seleccionar a nuevos beneficiarios cuando queden plazas vacantes or renuncias u otras circunstancias.