El consejero, que despejaba de esta manera las dudas de la oposición sobre el mantenimiento de la sanidad pública, presentó los planes de su departamento para los próximos cuatro años, entre ellos la aprobación de la Ley de Ordenación Sanitaria, la construcción de la mueva maternidad en los terrenos de O'Donnell, la mejora de la salud mental y el proceso de transferencias de las ompetencias sanitarias.

Explicó que, para llevar adelante estos proyectos, pretende emplear "la herramienta del diálogo", y pidió un acuerdo a la oposición para hacer de Madrid "un lugar de excelencia sanitaria, de vanguardia científica y clínica y un lugar de referencia, no sólo en España sino en toda la UE".

En cuanto a la política de drogas, dijo que la actuación de la Comunidad en este área se enfocará a los campos de la prevención y en los programas de reducción del daño.

Pedro Sabando,portavoz de Salud del PSOE en la Asamblea de Madrid, contestó a la promesa de Echániz de no privatizar la sanidad señalando que "privatizar no es cortar en trozos y vender, sino depauperar" el sistema mediante la reducción presupuestaria.

El diputado socialista se refirió al proceso de transferencias y exigió 120.000 millones más que los 475.000 estimados por la Administración regional, para inversiones en infraestructuras y tecnología clínica.

Con respecto al mapa hospitalario de la Comunidad, crrado a juicio de Echániz, Sabando pidió que se abra con la construcción de un centro en los terrenos de la antigua cárcel de Carabanchel o corvirtiendo el Hospital militar Gómez Ulla en un hospital general con una reserva de cama para la Fuerzas Armadas. Asimismo, pidió un hospital más en el Corredor del Henares o en Valdebernardo.

Caridad García, diputada de IU, defendió el modelo de gestión público de la sanidad y solicitó medidas más concretas, en vez de generalidades. Manifestó que la coalición btallará para que no se privatice la sanidad.