Borda, también socialista, anunció a Servimedia su intenció de estar en la cabeza de la manifestación que tendrá lugar el próximo día 16 ante la sede del ministerio que preside Borrell, convocada por la Plataforma Ciudadana por el Tren, IU y CCOO.

Tras los cortes de carretera y manifestaciones de 1990, el Gobierno prometió iniciar las obras del ramal ferroviario de cercanías desde la estación de Cantoblanco (Universidad Autónoma) hasta las mencionadas localidades.

Después vino el escándalo por los llamados "terrenos de Renfe" en San Sebastián de los Reye, con cuyas plusvalías la empresa pensaba financiar en parte el proyecto, y finalmente el silencio administrativo y la promesa de incluir el tren en el II Plan Felipe, que será aprobado previsiblemente este mismo mes. "No pedimos que lo incluyan por segunda vez en el Plan Felipe", afirmó Borda, "sino que empiecen las obras de una vez".

El edil añadió que "está claro que a este ministro no le gusta el tren", pero insistió en que "no nos bajamos del burro" en esta cuestión y que es un compromiso del Goberno que éste debe cumplir.

El pasado viernes tuvo lugar una reunión entre Borda y el jefe de Transporte de la Consejería de Transportes de la Comunidad de Madrid (CAM), Carlos Cristóbal, en la que los responsables municipales de Alcobendas proporcionaron una serie de datos que les había requerido la Consejería, entre ellos que el Plan General de Urbanismo extenderá el casco de esa ciudad por la carretera de El Goloso, en línea con el trazado barajado para la línea ferroviaria.

CARTA DE BLANCO

or su parte, fuentes del Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes coincidieron en culpar al ministro Borrell de la paralización del proyecto y recordaron que hace mes y medio el alcalde, José Luis Blanco, envió sendas cartas al presidente del Gobierno, Felipe González, a José Borrell y a Joaquín Leguina, presidente de la CAM, pidiendo una entrevista para hablar del tren.

En estos momentos, los más de 130.000 habitantes de Alcobendas y San Sebastián de los Reyes están unidos con Madrid por líneas de utobuses como único medio de transporte público, mientras la expansión urbanística permite prever que en pocos años esta población aumentará considerablemente.

El socialista Blanco considera "inadmisible" en la carta que una promesa de tal calibre se incumpliera sistemáticamente durante tanto tiempo (desde 1982).