Los extranjeros sin permiso de trabajo o residencia no tienen derecho a recibir asistencia sanitaria, salvo en casos de extrema necesidad. E la capital madrileña hay cinco Centros Integrales de Salud (CIS) municipales que atienden mensualmente a unos 700 inmigrantes.

Servicios Sociales considera que, de los cerca de 80.000 extranjeros que residen en el municipio, entre 25.000 y 30.000 se encuentran en situación ilegal, aunque es posible que el último proceso de regularización reduzca esa cifra.

La inmigración afecta a todas las administraciones del Estado, pero son las grandes capitales como Madrid quienes en mayor medida sufren las onsecuencias de la "ambigüedad" legal que rodea la cuestión, según Utrilla.

Así, el Ayuntamiento de Madrid ayuda, por principio y sin preguntar nada, a todos los niños hijos de inmigrantes que lo precisen. Cualquier mujer inmigrante embarazada es atendida ginecológicamente en el centro de Montesa, junto a Callao, donde nacen una media de 400 niños al año.

Además, en más de una docena de colegios del distrito Centro los hijos de extranjeros suponen hasta el 32 por ciento de los alumnos, con el coniguiente problema para los profesores y el Ministerio de Educación. Por dos razones, en primer lugar porque faltan enseñantes con dominio de las lenguas de los alumnos y que comprendan sus culturas, y en segundo lugar, porque en algunas aulas empiezan a irse a otros colegios los niños nacionales.

ONGs

Aunque se trate de inmigrantes ilegales, el ayuntamiento no puede encogerse de hombros, señaló la concejala, y colabora con varias organizaciones no gubernamentales en proyectos de integración social yescolar.

Concretamente, en los distritos Centro y Arganzuela trabajan, con financiación municipal, Cruz Roja, Cáritas, Médicos del Mundo, Karibú y la Obra Social Rosalía Rendú. Desde noviembre de 1994 se han atendido un total de 90 casos, a los que hay que añadir 50 menores extranjeros que la Rosalía Rendú acoge y apoya en materia socioeducativa para prevenir o paliar situaciones que impidan su desarrollo integral.

En el poblado magrebí de Peñagrande, distrito de Fuencarral, Estado, Comunidad de adrid y ayuntamiento han realojado en pisos de alquiler a 60 familias desde 1994. Uno de los problemas más importantes es que muchos hombres no quieren pagar alquiler por un piso, por mínimo que sea, ya que para ellos lo prioritario es enviar dinero a su familia.

Y en Aravaca, donde la colonia dominicana es muy numerosa, funciona desde finales de 1993 un proyecto de intervención social con inmigrantes.

Asimismo, la Asociación para la Atención, Prevención y Reinserción de la Mujer Prostituída (Aprmp), recibió este año casi 16 millones de pesetas de Servicios Sociales para una unidad móvil de atención a prostitutas inmigrantes.

POLITICA COHERENTE

Elena Utrilla tiene claro que "se debe hacer una política muy coherente" en el conjunto de España y la Unión Europea respecto al problema de la inmigración. "No se puede ir dando bandazos. Así se evitarían los bailes de personas de unas comunidades a otras".

La Comunidad de Madrid ha comenzado a estudiar un Plan Regional para la Integración Socil de los Inmigrantes, pero Utrilla ya ha pedido "una reunión a nivel estatal". Es preciso, según la concejala madrileña, que la Administración dé un "mensaje uniforme, que no sólo le venga al Ayuntamiento de Madrid, sino a todos los ayuntamientos".

La concejala cree que las tres administraciones deben dar una respuesta "coordinada" al menos en la integración escolar de los hijos de extranjeros y en los servicios sanitarios.

"Necesitamos saber qué podemos dar y con qué financiación", señaló Utrill, que valoró en más de 200 millones de pesetas el dinero que su área invierte este año en inmigración, sin contar con los recursos que emplean las 21 juntas municipales en becas escolares de comedor y ayudas de farmacia, guardería o alquiler de vivienda a ciudadanos de otros países.

Eso sí, la colonia china, minoritaria en la capital, no se acerca para nada a los servicios que presta el ayuntamiento o las distintas entidades que apoyan a los extranjeros necesitados.