López Aguilar, durante una acto en la sede del PSOE para hacer balance del primer año del Gobierno socialista en materia de justicia, aseguró que la situación de las personas que se cambian desexo es algo "resoluble" que estaba incluido en el programa electoral de su partido.

El titular de Justicia hizo esta referencia durante el coloquio que siguió a su exposición sobre la actuación de su departamento en los doce pasados meses, en los cuales dijo que han realizado una importante labor, aunque tienen por delante una "ambiciosa agenda".

En este sentido, se refirió a que la regulación del marco jurídico de los transexuales es algo que exige "pedagogía" y "explicación social", al igual que, dijo, sucede con la aprobación del matrimonio homosexual, que recibió la pasada semana el visto bueno del Congreso de los Diputados.

"NO VA CONTRA NADIE"

A este respecto, aseguró que la reforma que permitirá las uniones de personas del mismo "no va contra nada ni contra nadie", y "no atenta en absoluto contra el matrimonio heterosexual, cuyo estatuto jurídico queda intacto y preservado".

Aseguró que tampoco va en contra del matrimonio canónico u oficiado por la Iglesia Católica, ya que el carácter sacramental del mismo "es observado con respeto por la autoridad civil y por los poderes del Estado".

Junto a la referencia al eventual reconocimiento de los derechos de los transexuales, el ministro se refirió a que una de las reformas que tiene pensado impulsar este mismo año es la modificación de la Ley Orgánica del Poder Judicial, que rige el funcionamiento de los tribunales.

Explicó que los cambios en esta norma deben hacerse con anterioridad a las modificaciones que puedan introducirse en los Estatutos de Autonomía, al tiempo que apuntó que tendrán que abordarse aspectos como las competencias de los tribunales superiores regionales o el Supremo.

"APROXIMACION LAICA"

Con anterioridad, López Aguilar hizo repaso a la actuación de su departamento en el primer año de Gobierno socialista, trabajo que calificó de "muy estimulante" y que se ha centrado en tres capítulos: extensión de derechos ciudadanos; mejora de la seguridad, y perfeccionamiento del sistema judicial.

En el primer apartado situó la simplificación de los requisitos para el divorcio, algo que evitará el "encarnizamiento procesal", así como los matrimonios homosexuales, sobre los que destacó que acaban con una "discriminación brutal".

Apuntó que en este capítulo también se encuentra la potenciación de las relaciones con las confesiones religiosas minoritarias, para lo cual se ha creado una fundación, la cual, remarcó, no pretende promover el culto de estas creencias ni competir con la Iglesia Católica.

En este sentido, aludió a que el Ejecutivo socialista también quiere poner en marcha una "aproximación laica" a la sociedad, lo que no implica enfrentamiento con ninguna religión, sino que parte del hecho de que todas deben de cumplir por igual las obligaciones establecidas por la ley.

Por lo que se refiere a otros cambios abordados en los pasados meses, el titular de Justicia defendió la reforma del sistema de nombramiento de jueces por parte del Consejo General del Poder Judicial, que ha empezado a aplicarse al no poder impedirlo quienes pretendían "obstruir" su funcionamiento.

Junto a estas iniciativas, el ministro recalcó que su departamento entiende que en los próximos años tiene importantes retos, entre los que citó una reforma de la Ley del Menor, del Código Penal y de la Ley de Enjuiciamiento Criminal.