López Aguilar hizo estas declaraciones en la presentación del libro de caricaturas de "De Aznar a Zp", a la que también acudieron, entre otros, la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, y el presidente del Congreso de los Diputados, José Bono.

Aguilar aseguró que Mayor Oreja, cuando le dijo en el debate que el cabeza de lista del PSOE hace "una caricatura de la realidad", pretendía "humillarlo" con una expresión que viene a ratificar la diferencia que existe entre ambos partidos.

López Aguilar recordó que publicó su primera caricatura pintando a Pinochet para el diario canario "La Provincia", cuando con apenas 15 años logró convencer al director del periódico de su rapidez para dibujar a los políticos de la época.

Desde entonces, continuó pintando en la universidad y en su carrera política, pero siempre "desde la última fila", con un afán de esconderse mientras dibuja, que nació en su época del colegio cuando "profesores y curas" le "reprochaban" falta de atención a las clases.

"En el congreso me las he arreglado para poder dibujar sin que nadie me llamase la atención, en el escaño rojo de la oposición o en el azul del Gobierno", sin embargo en elParlamento Canario "han vuelto a reprocharme" esta afición, bromeó.

En este sentido, López Aguilar apuntó que sus caricaturas políticas "las ha hecho con un profundo respeto y afecto" a todos sus "compañeros, de uno y otro lado de la bancada".

Para concluir, este dirigente socialista invitó a "desconfiar del que sólo aspira a ser ministro y del que sólo aspira a la política" y añadió que las personas que "más admira no están en la política y nunca han estado en la política".

ZAPATERO "VÍCTIMA" DE LÓPEZ AGUILAR

Este libro cuenta además con el apoyo del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que junto con el arquitecto y humorista José María Pérez "Peridis", han elaborado los dos prólogos de esta recopilación de caricaturas políticas.

Zapatero se declara "una víctima del talento desbordante de Juan Fernando López Aguilar" y considera que "los caricaturistas" hacen "un favor" a los políticos, "al exagerar sus defectos y tics".

"La caricatura nos simplifica e incluso puede que nos deforme un poco. Pero, también nos humaniza y rompe cualquier apariencia de distancia que separe a políticos de ciudadanos", afirma el presidente.

A su juicio, lo que da "un valor inusual" a los dibujos de López Aguilar es que proceden de "un mundo aparentemente tan endogámico como es el de la política y a pesar de ello la suya" es "una mirada sin complacencia con toda la carga de sátira que se le supone al género".