En declaraciones a la revista "¡Hola!", Liliana afirma que los dos últimos años junto al torero, que permanece inmovilizado en una silla de ruedas tras sufrir una cogida cuando lanceaba un toro en la plaza francesa de Beziers (Frncia), "han sido precisamente los años de más lucha, los más inciertos".

"Sí ha existido mucha unión", añade Liliana, "creciéndonos juntos ante la adversidad. Lo que sí han sido es determinantes. La situación de Julio no es la causa de nuestra separación; sí lo es la tremenda distancia que sin darnos cuenta se estaba produciendo entre nosostros en cuanto a nuestra verdadera historia de amor. Las personas que nos rodean también han influido muchísimo, demasiado diría yo".

La esposa del torero, quemanifiesta haberse sentido presionada en muchas ocasiones por familiares y personas cercanas al diestro, recalca que "quieren mucho a Julio, pero no se dan cuenta de que me hacen daño a mí. Yo no soy Julio, no estoy en una silla de ruedas, no soy una figura del toreo y no he nacido aquí, pero también tengo sentimeintos y he sufrido mucho".

"La decisión de separarnos", explica Liliana, "fue a raíz de mi último viaje a Colombia. Yo estaba muy mal tanto físia como psicológicamente y la verdd es que cuand me fuí, iba con idea de volverme. Cuando esta allí nadie me llamó para saber cómo me encontraba. Llegaron entonce a mis oídos comentarios muy dolorosos que colmaron mi paciencia y por eso he tomado la decisión".

En otro momento de la entrevista, la esposa del torero afirma que Julio Robles es ahora una persona normal y que no hay ningún peligro en dejarlo. "Hemos buscado a una persona que va a estar junto a él todo el tiempo y en estos momentos se está viendo la capacidad de ambos para convivir".

"Julio", dice Liliana, "está capacitado para sobreponerse de su lesión de columna por sí solo, porque esté yo o esté con quien esté, él sabe que se tiene que recuperar. El esfuerzo tiene que hacerlo él mismo y él tiene mucho empuje, mucha fuerza de voluntd y muchas ganas de caminar otra vez, y además yo estoy convencida de que va a volver a caminar".

Respecto a un posible entendimiento entre ambos, la mujer del torero considera que "la situación no se ha creado ahora, viene de muchos años atrás. De hcho, es la quinta separación que tenemos entre nosostros y la definitiva. La verdad es que somos bastante diferentes y a medida que van pasando los años, se van notando más".

Liliana María, que señala que actualmente no existe una tercera persona en su vida, matizó que "la verdad es que desde que me casé con Julio, siempre le he respetado y ni se me ha pasado por la cabeza. Quiero arreglar mi situación, alejarme, relajarme un tiempo y pensar en mí, en mi familia y desde la distancia, estaré pendiente e la salud de Julio, por supuesto".

La mujer del diestro salmantino, que partirá muy pronto para Cali (Colombia), donde intentará recuperarse, confia en que Julio Robles se sobreponga pronto de esta situación.

"Creo que después de doce años juntos", matiza Liliana, "no olvidaré nunca a Julio. Puede que cambien mis sentimientos, pero olvidarle... y no tenerle cariño... es difícil que me olvide de él".

"Espero que la gente no me juzgue; doce años de matrimonio no son una casualidad. Si hemos etado tanto tiempo juntos, a pesar de la diferencia de caracteres, es poruqe ha existido cariño", conclye Liliana María.