En declaraciones a Servimeda, Sáinz explicó que esta actitud "nos traslada a la época de Aristóteles, donde las mujeres no podían participar ni en la política ni en el Gobierno".

A su juicio, "es una actitud inaceptable porque se trata de un círculo cultural, y muchos de ellos tendrían que estar orgullosos de que personas de tanto relieve quisieran estar como socias en este círculo".

Finalmente, Sáinz animó a los socios que votaron a favor de la inclusión de mujeres entre los afiliados del círculo a que pidan la dimisión d aquellas personas que han decidido rechazar esta opción.