Laborda, acompañado en su recorrido por el consejero delegado del COOB, Josep María Abad, inició su periplo en la exposición Barcelona'92 instalada en l estadio olímpico de Montjuïc, donde firmó en el libro de honor y luego se dirigió al Palau San Jordi y al INEF.

Durante su estancia en Barcelona, el presidente del Senado señaló que su visita era "la culminación de una serie de actuaciones realizadas y comparecencias de Pascual Maragall y de Josep María Abad ante la Cámara alta, por la que hemos podido seguir con actitud de apoyo toda esa evolución que hoy hemos podido comprobar".

Añadió que había recibido una agradable sorpresa. "Las dudas o e posible pesimismo", dijo, "han desaparecido y nos ha impresionado vivamente la recuperación de una parte de la ciudad que ha supuesto el esfuerzo de la creación de la villa olímpica, recuperación que quedará para después de los Juegos".

Laborda calificó, asimismo, de "hito urbanístico" la villa olímpica y señaló que "como observador de una realidad urbana, esa recuperación, esa calidad urbanística, la muestra de distintos estilos de construcción, son aportaciones que deja Barcelona para los habitante de la ciudad y para aquellos que tienen interés, científico incluso, por el urbanismo bien hecho".

El presidente de la Cámara alta finalizó su comparecencia ante los periodistas felicitando, en nombre del Senado, "a todos los que nos van a permitir ofrecer al mundo una Barcelona, una Cataluña, una España, una democracia española con prestigio al mundo, cuando la llama olímpica inaugure los Juegos Olímpicos".