Según el Gobierno, el 30 de junio de 1999 la Junta de Jefes de Estado Mayor de Estados Unidos comunicó al Mando Supremo Aliado en Europa de la OTAN (SHAPE) la utilización por parte de las Fuerzas Armadas norteamericana de munición que contenía uranio empobrecido.

"El SHAPE transmitió esta información el día siguiente (1 de julio) al Mando del Teatro de Operaciones de los Balcanes, que en este caso era el Mando Sur de la OTAN (AFSOUTH), quien a su vez lo comunicó al Mando de la Fuerza en Kosovo (KFOR), trasladándose posteriormente a los jefes de las unidades allí destacadas", agrega el comunicado.

De los mencionados datos se deduce, según el Gobierno, "que toda la información sobre este asunto fluyó a través delos canales de mando militar, en cuanto que era de interés para las operaciones, pero no se comunicó a los gobiernos de la alianza por no considerarse relevante a otros efectos".

No obstante, con motivo de esta información, la Agrupación española solicitó el concurso de un equipo de detección nuclear bacteriológico y químico (NBQ) del que dispone la Legión, "el cual, realizadas las pertinentes actuaciones en la zona, apreció niveles de radiación inocuos para la salud humana".