Así lo afirmó en rueda de prensa tras asistir esta mañana al acto institucional de toma de posesión de los consejeros en el Palau de la Generalitat, donde consideró que el líder del PSC debe de ofrecer “una comparecencia rápida”.

El nuevo Ejecutivo "no representa a todo el país, es excluyente y españolista, alejado de la centralidad de Cataluña", dijo Sales. Por ello, la dirigente solicitó “que comparezca lo antes posible en el Parlament para rendir cuentas, como corresponde, sobre la composición del nuevo Govern”.

Asimismo, pidió que los partidos firmantes de acuerdos de investidura, ERC y Comuns, den explicaciones sobre por qué de acuerdos entre fuerzas “supuestamente de izquierdas ha salido un Gobierno de derechas y españolista”, señaló.

Según la portavoz parlamentaria, el nuevo Ejecutivo “oficializa el regreso del autonomismo" e, incluso, "pone en riesgo la inmersión lingüística, con una consejera de Educación partidaria de aplicar el 25% de castellano en la escuela, y un consejero de Exteriores de claro perfil españolista”.

Asimismo, Sales indicó que el Ejecutivo de Salvador Illa “tendrá más consejerías que ambición política. Dieciséis consejerías son excesivas”. “Queremos expresar también que, sin embargo, no hay ninguna de Políticas Digitales. Es un Govern que mira más al pasado que al futuro”.

En este sentido, Sales advirtió de que en Junts per Cataluña, “como primera fuerza de la oposición y como primera fuerza de estricta obediencia catalana, seremos implacables con el Gobierno de Salvador Illa y velaremos para que no se produzcan retrocesos de país, en términos nacionales, de progreso y de bienestar”.

Por eso, la portavoz dijo que "trabajaremos para liderar la alternativa que Cataluña necesita y que permita al independentismo recuperar el Gobierno de la Generalitat".

En sintonía con el posicionamiento de Junts en el debate de investidura de Salvador Illa, Sales remarcó que éste será “un Gobierno sin ambición, y sin capacidad y voluntad de hablar de tú a tú con el Estado español para defender los intereses de los catalanes”. "Será un Gobierno que aplicará políticas planas, ordinarias, de encefalograma plano, de las que se sentirán muy cómodas en Madrid, pero que serán lesivas para el país".

Por último, señaló que "no nos resignaremos ante un Gobierno que trabajará para convertir la Generalitat en una gestoría burocrática y vacía y para hacer de Cataluña una región española".