En un comunicado de la dirección nacional de Junts y la agrupación local de Junts Ripoll, explican que a día de hoy una moción de censura es “inviable” porque “no es viable sustituir un gobierno en minoría por otro gobierno en minoría”, ya que “existe el riesgo de que la ciudadanía crea que se trata de un simple cambio de sillas”.

Exponen también que una moción de censura “incrementaría el riesgo de que la alcaldesa aumente el victimismo e incite a una confrontación social de difícil reconducción, al menos a corto plazo”. “Ya hemos visto que a Aliança Catalana esta estrategia le interesa y no tiene ningún límite ético para conseguir su propósito”, añaden.

Además, este partido comenta que la alternativa que surja a la alcaldesa tiene que ser “fuerte, con un gran apoyo popular y tiene que ser fruto, por tanto, de la voluntad mayoritaria de los ripolleses”. Se muestra convencido del “grave error” que supone para Ripoll la irrupción de una fuerza que “se vincula sin ningún rubor con las corrientes políticas más radicales de Europa”.

Por eso, destaca la dirección nacional de Junts y la agrupación local de Junts Ripoll en el comunicado, “nos disponemos desde ahora a revertirlo no en los despachos sino en las urnas”, en concreto, “a derrotarla allí donde la democracia habla más claro que nunca, que es en las urnas”.

El partido de Carles Puigdemont señala que Ripoll está gobernado por un equipo de gobierno en minoría y “sin capacidad para llegar a acuerdos” y Orriols “se ha instalado en la confrontación sistemática, ha instaurado un régimen personalista” y ha convertido este municipio y a sus habitantes “en instrumentos de la estrategia de su partido”.

Señala que los ripolleses decidieron que en Ripoll “no habría ningún partido con la mayoría absoluta” y que preferían de alcaldesa a Orriols, pero el partido mayoritario solo ha escuchado “una parte del mensaje” que le enviaron y “ha ignorado” el otro: “se ha quedado con la Alcaldía, pero no ha sido capaz de tejer las alianzas necesarias para defender el interés general del municipio”.

Según Junts, Orriols “se ha dedicado desde el primer día a defender el interés de su proyecto político, de su partido, no ha dudado en explotar su victimismo y utilizar la institución del Ayuntamiento para ponerlo al servicio de su estrategia electoral permanente”, hecho que “es patente en el conjunto de Cataluña y que perjudica gravemente al futuro de Ripoll”.