En este sentido, la primera de las ayudas irá destinada a la población de los campamentos de refugiados saharauis, que se encuentran ubicados en la localidad argelina de Tinduf, y que resultaron gravemente dañados por las inundaciones sufridas el pasado mes de febrero.

La segunda ayuda tiene como destino los departamentos de Santa Ana y Sonsonete en El Salvador, que resultaron afectados el pasado año por la tormenta tropical Stan y la erupción del volcán Llamatepec.

Por último, la tercera ayuda humanitaria tiene como fin la reconstrucción de las viviendas afectadas por el terremoto que padeció la provincia de Alhucemas, en el norte de Marruecos.