LA JUNTA ANDALUZA CIERRA EL SERVICIO DE CIRUGIA VASCULAR DE UN HOSPITAL GRANADINO CON MAS DE MIL PACIENTES EN LISTA DE ESPERA
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La Delegación Provincial de la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía en Granada mantiene cerrado el servicio de Cirugía Vascular del Hospital Ruiz de Ala, al detectar graves irregularidades en la actuación de algunos médicos que atienden este servicio.
Los responsables de la sanidad en esta ciudad cerraron el servicio a mediados del mes de julio, pero en un principio se creyó que era una simple medida ante las vacaciones estivales.
Sin embargo, a estas alturas del mes de septiembre el servicio continúa cerrado con más de mil pacientes en lista de espera para ser intervenidos quirúrgicamente.
Según Comisiones Obreras, el funcionamiento del srvicio era anómalo. Un portavoz de la central aseguró que era habitual la falta de asistencia y atención por parte del propio responsable del servicio y de otros facultativos.
El delegado provincial de Salud, Manuel Rodríguez Elvira, confirmó que el 50 por ciento de los facultativos en plantilla se encontraba de baja permanente, lo que provocaba un verdadero colapso en el servicio.
CCOO considera que este tipo de anomalías se han venido consintiendo durante mucho tiempo. "Incluso", dijeron, "los ropios doctores animaban a los enfermos que precisaban de una intervención inmediata, para que se trasladaran a alguna clínica privada".
Entre las irregularidades denunciadas por el sindicato destacan la ausencia de médico de guardia y la desviación de enfermos a centros privados. Incluso algún facultativo de baja en el servicio estuvo operando en otro centro privado.
Otra irregularidad denunciada por la central sindical es la prescripción de altas médicas antes de tiempo para dejar camas libres. Según Rodríguez Elvira, el cierre del servicio es provisional hasta que se normalice la situación. Por su parte, los representantes de la sección sindical de CCOO exigen responsabilidades al delegado provincial y aseguran que este tipo de anomalías ya se conocían y se venían consintiendo desde hace tiempo.
El jefe de Cirugía Vascular del citado hospital, Antonio Cabrera, declaró que el cierre del servicio es un verdadero delito social, cuando existen más de mil pacientes en lista de espera para sr intervenidos, pero declinó pronunciarse sobre las manifestaciones de CCOO.
(SERVIMEDIA)
19 Sep 1991