El juicio se celebrará en la Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional. El fiscal pide que Gallastegui Sodupe sea condenado a 30 años de cárcel como cooperador necesario de un delito de asesinato terrorista.

Además, la Fiscalía de la Audiencia Nacional pide que Gallastegui Sodupe indemnice con un total de 1.005.963,05 euros a los legítimos herederos del magistrado asesinado.

El magistrado fue asesinado a tiros al salir del garaje de su domicilio, cuando se dirigía en coche al trabajo acompañado por su mujer.

Según el escrito de conclusiones provisionales, el fiscal considera probado que fue Gallastegui Sodupe quien se encargó de recabar, durante dos semanas y en días alternos, la información sobre el horario habitual del magistrado, el coche que utilizaba, el itinerario que recorría hacia su trabajo y las medidas de seguridad que le rodeaban.

Gallastegui Sodupe trasladó esos datos a quien previamente le había encargado las labores de vigilancia sobre el magistrado, el presunto miembro de ETA Urtzi Murueta Gondra. Este. a su vez, remitió la información a los miembros del comando encargados de acabar con la vida del juez.

Según el fiscal, como presuntos autores materiales de los disparos que acabaron con la vida del magistrado Lidón se encontrarían los fallecidos Hadei Galarraga Irastorza y Egoitz Gurentxaga Gogorza, supuestos integrantes del "Comando Vizcaya". Ambos fallecieron el 23 de septiembre de 2002, al explotar la bomba que transportaban en su vehículo.