La Guardia Civil fue la encargada de detener a un hombre de 69 años como presunto autor de delitos de agresión sexual, tras acudir al cuartel de Llíria (Valencia) para confesar que llevaba décadas agrediendo sexualmente a menores de su entorno a lo largo de más de 50 años.

El hombre confesó haber cometido agresiones sexuales a cinco menores de su entorno entre las que estaban una nieta suya con discapacidad, una hermana, su cuñada, una amiga de su nieta y una niña de 8 años que aún es menor de edad.

El presunto pederasta acudió el pasado domingo al cuartel de la Guardia Civil acompañado de su actual mujer, madre de una de las víctimas, y confesó las agresiones sexuales que realizó durante décadas. A la mañana siguiente de su confesión, y tras haber contactado con las víctimas para que interpusieran la pertinente denuncia, la Guardia Civil lo detuvo.