EDUCACIÓN

JUDÍOS, MUSULMANES Y EVANGÉLICOS ESTÁN DE ACUERDO CON QUE LA CLASE DE RELIGIÓN SEA VOLUNTARIA Y NO COMPUTE

MADRID
SERVIMEDIA

Representantes de las confesiones judía, musulmana y evangélica expresaron hoy su satisfacción ante las medidas planteadas por el Gobierno para la enseñanza de la religión en los centros educativos.

El Ministerio de Educación ha informado de que esta asignatura será voluntaria y no computará para becas ni para hacer media. Sus profesores se regirán por el Estatuto de los trabajadores y, para que la autoridad religiosa competente les retire la idoneidad, será necesario que motive su decisión. Unos planteamientos que han levantado ampollas en el seno de la Conferencia Epsicopal, que sostiene que "permanecen las dificultades" con Educación.

El secretario general de la Federación de Comunidades Judías de España, Jacques Laredo, dijo hoy a Servimedia que ésta es "una buena decisión del Gobierno".

A su juicio, "no se vulnera el derecho de nadie, puesto que todo el que quiera aprender y practicar su religión va a poder hacerlo". "Puesto que la Constitución reconoce la separación de las religiones y del Estado, esta medida no hace más que aplicar el texto constitucional", añadió.

Por su parte, el presidente de la Comisión Islámica de España, Riai Tatary, señaló que "nosotros admitimos que la clase de religión sea voluntaria y no computable. Estamos de acuerdo con ello".

Asimismo, se mostró satisfecho con las medidas adoptadas en referencia al profesorado de religión. "Lo que hace falta es que la religión musulmana se imparta ya en todo el territorio nacional", puntualizó.

El portavoz de la Alianza Evangélica Española, Pedro Tarquis, declaró que "nos parece absolutamente correcto que la religión confesional no compute y sea voluntaria. Otra cosa sería contraria a un Estado laico".

No obstante, matizó que "lo ideal" sería que no hubiera enseñanza religiosa confesional dentro de la escuela pública. Para Tarquis, la enseñanza de la religión es un derecho y un deber de los padres, pero debe ejercerse en la iglesia o en el ámbito familiar.

Por otro lado, Tarquis abogó por la enseñanza de una asignatura de Historia y cultura de las religiones (similar a la que establece el ministerio en Secundaria, como alternativa a la religión), común a todos los alumnos, para que aprendan nociones sobre el hecho religioso.

Actualmente, para que en un colegio público se imparta una clase de religión que no sea la católica, debe haber al menos diez alumnos que la demanden.

Al margen de esto, y según las citadas fuentes, hay tres colegios privados en los que los estudiantes reciben clase de religión judía (en Madrid, Barcelona y Melilla), y dos de religión evangélica (en Madrid). En cuanto a la religión islámica, actualmente hay 33 profesores que imparten clase en centros de Ceuta, Melilla, Andalucía y Aragón.

(SERVIMEDIA)
06 Dic 2006
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