Los hechos ocurrieron al filo de las cuatro de la madrugada, cuando una llamada anónima a la policía anunció que un hombre yacía muerto en labarriada de Nuevo San Andrés, una de las más deprimidas de la capital malagueña.

Los agentes se personaron en el lugar de los hechos y comprobaron que el cuerpo sin vida pertenecía a J.V.L., que recibió varias puñaladas en la región torácica, lo que pudo costarle la vida de forma instantánea.

Horas después del hallazgo del cadáver, la policía procedió a la detención de F.L.L., de 26 años, a quien se considera el presunto autor del apuñalamiento. Tanto la víctima como el detenido poseen un amplio istorial delictivo.