En un acto celebrado en la sede de la fundación, en Madrid, el presidente del Consejo General de la ONCE, José María Arroyo, presentó al director general, de quien destaó "su gran actividad y capacidad de trabajo, de los que esperamos una labor altamente eficaz".

Pichel asumirá la gestión de la Dirección General de la Fundación, mientras que Manuel Oliver, hasta ahora director gerente, pasa a ser responsable del área de Integración Laboral de la ONCE.

José Manuel Pichel dijo tras su nombramiento que llega a una fundación donde personas y colectivos tienen depositadas "esperanza y confianza" en que se les resuelvan muchas necesidades primarias de los minusválidos

"Para ello", añadió, "todos nosotros tendremos que hacer compatible la serenidad y la prudencia con el dinamismo, la eficacia y la generosidad para poder seguir cubriendo esas necesidades a muchos miles de minusválidos de este país".

Pichel dijo que desde su responsabilidad y con todos los componentes de la Fundación ONCE, "en estos momentos, en los que se cuestiona el Estado de Bienestar, debemos ser capaces de implicar, de entusiasmar a las administraciones y a las empresas en nuestro proyecto.

José María Arroyo agradeció también al nuevo responsable de integración laboral de la ONCE y director gerente saliente de la Fundación, Manuel Oliver, "su trabajo y entrega. Un trabajo no demasiado espectacular, con pocas alharacas, pero un trabajo muy eficaz".

Rafael de Lorenzo, vicepresidente ejecutivo de la Fundación ONCE, destacó "las virtudes imaginativas y el valor" del recién nombrado director general, para el que pidió "todo el apoyo" de los directivos de la fundación.

Jose María Aroyo instó a los responsables de la fundación a "apoyarse en las experiencias de los demás", y lograr "el objetivo fundamental que nos lleva, la integración plena de los minusválidos".

José Manuel Pichel, de 34 años, ha sido vendedor del cupón de la ONCE entre 1980 y 1986, y ya en 1985, con 25 años, accedió a la Dirección de la Agencia Administrativa de la ONCE en Girona, cargo que ocupó hasta 1986, año en el que fue nombrado delegado territorial de la ONCE en Castilla y León. Esta responsabilidad la esarrolló entre 1986 y 1990. Desde 1990 hasta su nombramiento como director general de la Fundación ONCE ha sido delegado territorial de la organización en Andalucía.