Jiménez-Blanco señaló que "sonrepugnantes ante la ley todos los privilegios", como los que tienen las administraciones públicas al ser juzgadas sus actuaciones por tribunales especiales.

Con respecto a los conflictos contenciosos administrativos que se plantean con las instituciones del Estado, el catedrático andaluz manifestó que "las administraciones subestatales son las que plantean los verdaderos problemas, y no, aunque pueda parecer lo contrario, las instituciones que dependen directamente del Estado".

Asimismo, Jiménez-lanco culpó a las medidas cautelares y a la ejecución de sentencias de ser los dos principales problemas que impiden la pronta y buena resolución de los conflictos contenciosos-administrativos.