Propuso que el gasto de estos cheques-guardería se destine "a construir una red pública de calidad, que es lo que realmente están reclamando los padres".

"Con los 33 millones de euros presupuestados se podrían construir 28 escuelas infantiles, que darían plazas a cerca de 3.000 niños, es decir, casi las plazas que se pretende conseguir con el decreto de mínimos, pero sin rebajar su calidad", indicó Vaquero.

A su juicio, la política del cheque-escolar llevada a cabo por el Gobierno de Esperanza Aguirre "no está garantizando la extensión de la enseñanza de 0 a 3 años ni la calidad de ésta, porque se están manteniendo centros cuya calidad no se controla".

Planteó que, "en lugar de despilfarrar dinero con el sistema del cheque, se apueste por ampliar las plazas en las escuelas públicas".