A juicio de Herrera, la persona que utilizó la estricnina podría ser responsable de un delito contra la salud pública y el medio ambiente.

La coalición denunció hace unas semanas la aparición de una docena de perros muertos en la Casa de Campo por ingerir un veneno otente, presumiblemente estricnina, hecho que, según anunció IU esta semana, se volvió a repetir en el albergue juvenil de ese parque y en el Campo del Moro.

Sin embargo, Herrera señaló que tras comunicar estas muertes a los concejales de Sanidad y Consumo, Simón Viñals, y de Medio Ambiente, Esperanza Aguirre, la coalición no recibió ninguna respuesta.

Ante esta actitud, que calificó de inhibición de los responsables municipales frente a un hecho grave que también puede causar daños a niños y adoescentes, IU decidió solicitar la investigación de estos casos a las autoridades municipales.

En la denuncia presentada en el juzgado, el portavoz de la coalición afirma que el que en un lugar público de fácil acceso y tan utilizado por los madrileños como la Casa de Campo aparezcan sustancias tóxicas y peligrosas, supone una seria amenaza para la salud de los ciudadanos.

Por ello, considera que este riesgo es suficiente para abrir la correspondiente investigación judicial y depurar las responsablidades que existan, "tanto si se actuó de forma maliciosa como si fuera consecuencia de una negligencia en la utilización de productos que atentan contra la salud".