El matrimonio Boyer, acompañado por sus hijas Tamara y Anita, se desplazó hasta uno de los rincones más paradisíacos y exclusivos de la isla de Santo Domingo, La Romana, zona costera donde se enclava la urbanización "Casa de campo".

Según la revista, los Boyer alquilaron una villa e el citado enclave de 600 metros cuadrados habitables, divididos en dos plantas con jardín. El alquiler de la casa les costó 2.500.000 pesetas.

La familia se desplazó por los amplios jardines de la residencia en un pequeño cochecito de golf, a causa de las largas distancias que tenían que recorrer para poder disfrutar de la finca.

Todos ellos salieron también a pasar una jornada en alta mar, para lo que alquilaron un yate por 125.000 pesetas. Asimismo, la familia alquiló dos automóviles con chófe durante toda la estancia, que les costó 500.000 pesetas.

Los billetes de avión de ida y vuelta Madrid-Santo Domingo para el matrimonio costaron casi 750.000 pesetas. A ello hay que sumar los de Tamara y Ana, cuyo precio, por ser tarifa juvenil, es menor: 82.000 pesetas cada uno, más el billete de la niñera, que costó 150.000 pesetas. Además, hay que añadir el precio del alquiler de una lujosa avioneta de lujo que les costó 150.000 pesetas.

Al parecer, siempre según "Diez Minutos", el gasto totalha superado los 5 millones de pesetas, lo que ha hecho posible que estos días se convirtieran en unas vacaciones inolvidables para la familia Boyer-Preysler, que disfrutó al máximo del lugar elegido.