Rodrigo Rato, que acudió al Congreso para defender el proyecto del Gobierno en el inicio de su andadura parlamentaria, aseguró que su propuesta fisca hará que los trabajadores noten en sus salarios del próximo mes de enero el efecto de una mayor remuneración por la bajada de las retenciones que lleva aparejado el nuevo impuesto.

El responsable de Economía ironizó con las críticas del PSOE que niegan este efecto beneficioso, al señalar que al margen de los discursos, "el próximo 30 de enero no está tan lejos".

"Hoy", dijo Rato, "se avanza de manera sustancial, ya que la reforma tiene un respaldo político suficiente para una transformación muy mportante del IRPF".

El nuevo IRPF, reiteró, supondrá una bajada de impuestos, sobre todo para las rentas más bajas, y una mayor simplificación a la hora de liquidarlo, ya que cinco millones de españoles dejarán de hacer declaración y 1,8 millones dejarán de pagar por este motivo a Hacienda.