Para ello, el Gobierno promete a Cantabria la cesión de las tasas de juego y la consolidación en la participación de esta comunidad en los fondos del Estado.

Esta última competencia, que acordó transferirse el 20 de enero de 1992 en el acuerdo de financiación autonómica quinquenal, permite aumentar el porcentaje de los ingresos y superar la cuota de 15 por ciento del IRPF, circunstancia que impedía la inclusión de Cantabria en la cesión del impuesto.

El consejero de Economía aseguró que el 20 de septiembre, fecha en la que, según Pérez, se reunirá el Consejo de Política Fiscal y Financiera, se formalizará la cesión de estas transferencias.

PREOCUPACION

A pesar de ello, Manuel Pérez mostró cierta preocupación porque la cesión del impuesto podría provocar que unas comunidades perciban más que otras y el principio de solidaridad "quede quebrdo".

Sobre la posible participación de responsables autonómicos en la gestión de la Agencia Tributaria, Pérez afirmó que el planteamiento del Gobierno es "muy pobre y etéreo". "No nos gusta la palabra colaboración, que es la que figura; pedimos participación plena".