Para las Cámaras, el comportamiento del IPC durante el mes de mayo confirma las tensiones inflacionistas que sufre la economía española y alerta de que el diferencial de inflación con la Unión Europea (UE) puede suponer una pérdida de competitividad para las empresas españolas.

Finalmente, solicitan medidas normativas que favorezcan la apertura exterior de la economía espñola, una mayor competencia de los mercados, y más intensidad en las acciones en materia de política fiscal.