En su turno de intervención en el debate, Saura denunció "dos hechos graves" sucedidos tras las elecciones del 12 de marzo, que contrastan, en su opinión, con las reiteradas ofertas de diálogo lanzadas por Aznar desde el día de su victoria.

En primer lugar, se refirió a la "interpretación arbitraria" del Reglamentodel Congreso esgrimida por la Mesa de la Cámara, en la que el PP tiene mayoría absoluta, para permitir que Coalición Canaria formara grupo parlamentario propio y negar este mismo derecho al Bloque Nacionalista Galego.

En segundo lugar, aseguró que no es posible ofrecer diálogo a la oposición para suscribir un pacto de Estado por la Justicia mientras el Gobierno permanece "pasivo y silencioso" ante actuaciones "escandalosas" del fiscal general.

José María Aznar expresó su desacuerdo en este puntole pidió que no juzgue la gestión del fiscal general por criterios de conveniencia en cada momento.

En su discurso, Saura interrogó a Aznar sobre sus proyectos concretos para conseguir un mercado laboral más estable, modernizar el país respetando el medio ambiente, desarrollar el Estado del bienestar y reconocer e impulsar las pluralidad de España.

Aznar agradeció el tono del discurso de Saura y argumentó sus discrepancias con el diputado de IC en lo relativo a la pluralidad del Estado, por enteder que su gestión está permitiendo la proyección y la convivencia de todas las identidades.