CiU defendió la necesidad de establecer una tarifa telefónica "a un precio asequible", inferior al aprobado por el Gobierno el pasado viernes (3.000 pesetas en horario de ocho de la tarde a ses de la mañana) y con carácter opcional para el usuario en relación con las llamadas locales a través de la red de Internet.

El senador de CiU Josep Varela subrayó que España sigue siendo uno de los países de la UE con un menor índice de usuarios de Internet y recordó que la tarifa telefónica local ha sido tradicionalmente cara y sometida a monopolio, por lo que la introducción de Internet, "además de ser tardía, es cara y lenta".

A la iniciativa de los nacionalistas catalanes se sumó a últim hora una enmienda socialista en la que se pedía el establecimiento de la tarifa plana en 3.000 pesetas, pero durante las 24 horas del día.

De igual modo, de acuerdo con la enmienda defendida por el senador socialista Félix Lavilla, el precio de la tarifa nocturna y festivos debería ser de 1.000 pesetas.