El IPSE remitió una carta a HBO-MAX en la que señaló que “retiren este programa o, de lo contrario, advertiremos a nuestros amigos, simpatizantes y socios para que tramiten su baja de su plataforma, así como que avisen a sus contactos a que procedan a lo mismo”. “No queremos este tipo de programas que comercializan a las mujeres y que son prácticamente pornográficos”, añadió.

Asimismo, otra de sus preocupaciones es que el rango de edad al que va destinado el programa es de 12 años, un hecho que este organismo considera “grave dado que el nudismo del programa ni mucho menos puede ser recomendado para niños”.

Por ello, el presidente del IPSE, Pablo Hertfelder García-Conde, instó a la plataforma a que cambien la clasificación de edad porque “se está dando a entender que el público al que va destinado el programa podría ser infantil-juvenil y esto no debería ser así”.