González-Enríquez hizo esta afirmación durante la presentación del libro editado por la Fundaciónla Caixa "España ante la inmigración", de la que es coautora con la doctora en Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma de Madrid Berta Alvarez y el sociólogo y catedrático de la Universidad Complutense Víctor Pérez-Díaz.

Según González-Enríquez, la integración de los inmigrantes es España, especialmente de los marroquíes, dependerá de si el Gobierno presta más o menos atención a los problemas de este colectivo. A su juicio, una salida a la crisis entre España y Marruecos podría contribuir a faciitar la integración de los marroquíes en España.

Además, González-Enríquez comentó que existen tres tipos de españoles frente a la inmigración: una minoría, por lo general sin estudios y de zonas rurales, que rechazan a los inmigrantes por creer que quitan trabajo a los españoles; una gran mayoría de españoles que ven el fenómeno de la inmigración como positivo para la mejora de la economía y el sistema de pensiones; y otro grupo minoritario, que vive en barrios donde el 10% de los habitantes son inmirantes, que rechazan a los miembros de este colectivo.

Sobre este último grupo de españoles, esta profesora de la UNED comentó el caso de los barrios de Lavapiés (Madrid) y Mataró (Barcelona), donde la falta de comunicación entre españoles e inmigrantes es la que provoca que surjan problemas de convivencia, que, en su opinión, deben ser solucionados a través de la mediación de las administraciones públicas.

En este sentido, destacó que hasta ahora son los ayuntamientos y las ONG las que se encargn de solventar los problemas de comunicación entre autóctonos y extranjeros.

No obstante, García-Enríquez dijo que no cree que en estos barrios se produzcan sucesos de enfrentamientos graves entre la población autóctona y los inmigrantes, como ocurrió el año 2000 en El Ejido (Almería).

Por su parte, la profesora Berta Alvarez-Miranda dijo que los españoles ven con cierto "pesimismo" la ordenación de los flujos migratorios en nuestro país. La mayoría de los españoles piensan que sólo deben llegarEspaña lo que vienen a trabajar.

En este sentido, la profesora Carmen González-Enríquez indicó que en España hay una sensación de la que la inmigración es una cuestión incontrolada y que el Gobierno no es capaz de regularla.

Finalmente, el sociólogo Víctor Pérez-Díaz señaló que el fenómeno de la inmigración es un problema "muy considerable" y "complejo" que necesita de un debate cívico "para que no se nos desmadre".