(CEAR), que viene trabajano desde 1979 por la Defensa y la Protección de los Refugiados, fue elegida por la organización europea RETAS (Refugee Education and Trainig Advisory) para realizar en España un estudio de viabilidad sobre la creación de un Fondo para el Empleo y la Educación de los Refugiados.

El análisis constata la buena predisposición por parte de muchos organismos públicos y privados para colaborar en la creación de ese Fondo para los Refugiados.

Un estudio reciente del Instituto de Migraciones y Servicios Soiales (IMSERSO) revela que prácticamente la mitad de los solicitantes de asilo y refugiados entrevistados se encuentra desempleado en la actualidad y busca trabajo (49%).

Un 46% tiene algún tipo de empleo, aunque en condiciones muy variables y únicamente un 16% tiene un puesto estable. En torno a un 30% de los entrevistados aseguraba encontrarse trabajando en condiciones precarias.

Según CEAR, estos datos demuestran que la principal dificultad en la inserción de los refugiados es, junto a la obteción de una vivienda, el conseguir un empleo estable y bien remunerado.

Aunque muchos refugiados comienzan desde cero en sectores laborales abandonados por los españoles (agricultura, construcción, hostelería y servicio doméstico), se percibe, en muchos casos, la reivindicación del "estatus que gozaban en sus países de origen.