Según las conclusiones de ese Barómetro, son precisamente los problemas de tipo económico y la inmigración las principales preocupaiones de los catalanes.

Concretamente, el 86,8% de los encuestados opinaron que la Generalitat debería participar activamente en la implantación de políticas relacionadas con la inmigración.

De hecho, los catalanes sitúan la inmigración como el segundo problema más importante de Cataluña (con un 36,1%), detrás de los problemas de tipo económico.

Además, el 80,1% de los ciudadanos de Cataluña son partidarios de facilitar la entrada sólo a los inmigrantes que tienen un contrato de trabajo.

En cuanto a la valoración de la magnitud de la inmigración en Cataluña, como en estudios anteriores, alrededor de la mitad de los encuestados consideran excesivo el número de personas procedentes de otros países que vienen a esta comunidad autónoma.

La empresa Line Staff es la encargada de hacer este estudio a partir de las entrevistas a 1.400 personas representativas de la distribución de la población en Cataluña.