Tras la ceremonia, tendrá lugar un almuerzo en el Palacio Real de Pedralbes, que acogerá a los más de 1.300 invitados que asistirán a la comida de celebración. Al parecer, las invitaciones de boda comenzarán a ser enviadas antes de las vacaciones del verano.

Respecto a los invitados, es segura la presencia de los reyes de Grecia y sus hijos, familia directade la novia. Por parte de Bélgica, asistirían la reina Paola y sus hijos, los príncipes Felipe, Astrid y Laurent.

Los grandes duques de Luxemburgo asistirían con sus hijos. Suecia podría enviar a Victoria, la princesa heredera, y a sus hermanos, Carlos Felipe y Magdalena; por Nuruega cabe contar con la presencia de la reina Sonia y sus hijos, y también las soberanas danesa y holandesa vendrían con sus hijos.

A todos ellos hay que unir las casas de Francia, Bulgaria, Habsburgo, Rumanía, Saboya, si olvidar al reino de Marruecos, los reyes de Jordania, así como los Emiratos Arabes y el sultán de Brunei, quienes también estuvieron en Sevilla en la boda de la Infanta Elena y Jaime de Marichalar.

LUGAR DE HONOR

Los duques de Calabria ocuparán un lugar de honor, no en vano don Carlos es infante de España y actualmente figura en cuarto lugar en la línea de sucesión al trono, después de la infanta Cristina.

Los más importantes representantes de la aristocracia española, los miembros del Gobiern, presidentes de Comunidades Autónomas y otras personalidades del mundo de la cultura, la economía y el deporte también asistirán a la boda.

Tampoco faltarán los amigos de los novios relacionados con el mundo del deporte. Por parte de la infanta Cristina surgen los nombres de Vicky Fumado o los hemanos Doreste y por parte del novio, sus compañeros del equipo de balonmano del Barcelona y de la selección nacional de la que Iñaki Urdangarín es miembro.