LA INFANTA ELENA ASEGURA QUE SEVILLA "ES UNO DE LOS CENTROS EN LOS QUE SE DEDICE EL FUTURO DE NUESTRA NACION"
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La infanta Elena agradeció hoy "con especial orgullo" haber recibido eltítulo de 'hija adoptiva' de Sevilla, y destacó la categoría de la capital hispalense "como cabeza de Andalucía y como uno de los centros importantes en los que se decide el presente y futuro de nuestra nación".
La alcaldesa de Sevilla, Soledad Becerril, le entregó a la infanta Elena el título de 'hija adoptiva' en un acto al que asistieron más de 5.000 personas, entre ellas 250 personalidades de la vida pública, política y militar, así como representantes de la nobleza y de la Iglesia, según informarn fuentes de la Policía Local.
Doña Elena, que recibió el título a ritmo de palmas, lucía un traje-chaqueta color caldera con una gran solapa color hueso. La infanta aseguró que "lleva a Sevilla en el corazón" y calificó de "imborrable" el recuerdo que conserva de esta ciudad, debido al cariño y la alegría con que sus habitantes la acompañaron en el "día más importante" de su vida.
Al acto asistió la corporación municipal anterior y la actual, excepto el grupo municipal de Izquierda Unida, cuyo prtavoz, Luis Pizarro, no intervino.
En su discurso, Soledad Becerril dijo que el hecho de que doña Elena eligiera a Sevilla para celebrar su boda revela la estrecha relación entre la Corona y la ciudad, que se remonta a los tiempos de Fernando III.
Becerril aprovechó también el acto para reclamar la solidaridad de la Corona con los problemas de la ciudad. "Sevilla es vuestra ciudad para todo y también se volverá hacia vos para solicitaros apoyo en momentos difíciles como lo son los que ahora atraesamos, en los que muchos jóvenes sevillanos están desesperanzados por la falta de trabajo, a pesar de haber hecho, tanto ellos como sus familias, grandes esfuerzos para su formación", afirmó.
Entre los asistentes también se hallaban la gran duquesa de Rusia, Gerarda de Orleáns, prima del Rey; la duquesa de Alba; el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves; el del Parlamento andaluz, Diego Valderas; y el arzobispo de Sevilla, Carlos Amigo.
Tras el acto público en la Plaza de San Franciso, doña Elena y don Jaime de Marichalar inauguraron una escultura de Cristóbal Colón, de 42 metros de altura, regalo del ayuntamiento de Moscú a la ciudad de Sevilla.
Posteriormente, acudieron a la sede de la Real Maestranza de Caballería, donde entregaron el dinero recaudado en el espectáculo ecuestre celebrado en la víspera de su boda a las Hermanitas de los Pobres, las Hermanitas de la Cruz y la Fundación Anti-Sida, que recibirán siete millones de pesetas cada una de ellas.
Esta tarde, los duqes de Lugo tienen previsto inaugurar la exposición "Universitas Hispalensis", que consta de 184 piezas, entre ellas 300 incunables, en conmemoración del 490 aniversario de la fundación de la Universidad de Sevilla.
(SERVIMEDIA)
09 Oct 1995
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