INFANTA. LOS BALCONES QUE DAN A LA CATEDRAL DE BARCELONA SE ALQUILAN POR UN MILLON DE PESETAS EL DIA DE LA BODA
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El alquiler de los balcones que dan a la plaza de la catedral de Barcelona supera el millón de pesetas para presenciar la boda de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarín, que tendrá lugar el próximo día 4 de octubre, según señala la revista "Diez Minutos".
Al parecer, aunque aún no está confirmado, la catedral de Barcelona será el teplo que acogerá la boda de la hija menor de los Reyes, que oficiará el arzobispo de Barcelona, Ricard Maria Carles.
Según "Diez Minutos", la sala oval del Palacio Nacional, situado en Montjuic, acogerá a los más de 1.300 invitados que asistirán a la comida de celebración, cuyo pan artesano fabricarán un total de 16 panaderías de la zona de Carballo, en La Coruña, que ya se han dirigido a los Reyes ofreciéndose para cocer el pan que se consuma.
Por otra parte, diez afamados pasteleros barceloneseshan aprovechado la circunstancias de la boda real para presentar sus propuestas de pastel nupcial. Bizcocho, trufa y crema son los protagonistas de diez obras de arte pensadas para endulzar el enlace.
Según "Semana", la Familia Real se alojará en el Palacete Albéniz, monumento de estilo neoclásico situado en Montjuic y construido para la Expo que se celebró en Barcelona en 1929.
En la mañana de la boda, la Familia Real se trasladaría en coche desde dicho palacete hasta el Real Círculo Artístico, rente a la catedral, desde donde la infanta Cristina iría a pie del brazo del Rey. En el interior ya esperarían el novio y el resto de la comitiva nupcial e invitados.
Tras la ceremonia, los Reyes y el resto de invitados se trasladarán al palacio Albéniz, en cuyos jardines se ofrecería un cóctel, mientras los recién casados recorrerían los alrededores de la catedral de Barcelona en coche descubierto.
Respecto a los invitados, es segura la presencia de los reyes de Grecia y sus hijos, familia direta de la novia. Por parte de Bélgica, asistirían la reina Paola y sus hijos, los príncipes Felipe, Astrid y Laurent. Los grandes duques de Luxemburgo asistirían con sus hijos. Suecia podría enviar a Victoria, la princesa heredera, y a sus hermanos, Carlos Felipe y Magdalena; por Noruega cabe contar con la presencia de la reina Sonia y sus hijos y también las soberanas danesa y holandesa vendrían con sus hijos.
A todos ellos hay que unir las casas de Francia, Bulgaria, Habsburgo, Rumanía y Saboya, sin lvidar al reino de Marruecos, los reyes de Jordania, así como los Emiratos Arabes y el sultán de Brunei, quienes también estuvieron en Sevilla en la boda de la infanta Elena y Jaime de Marichalar.
Los duques de Calabria ocuparán un lugar de honor, no en vano don Carlos es infante de España y actualmente figura en cuarto lugar en la línea de sucesión al trono, después de la infanta Cristina. Los más importantes representantes de la aristocracia española, los miembros del Gobierno, presidentes de comuniades autónomas y otras personalidades del mundo de la cultura, la economía y el deporte también asistirán a la boda.
Tampoco faltarán los amigos de los novios relacionados con el mundo del deporte. Por parte de la infanta Cristina se barajan los nombres de Vicky Fumado o los hermanos Doreste y por parte del novio, sus compañeros del equipo de balonmano del Barcelona y de la selección nacional, de la que Iñaki Urdangarín es miembro.
(SERVIMEDIA)
22 Mayo 1997
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