Las obras provienen de otros anticuarios con antecedentes de receptación, lo que hace sospechar a los investigadores que son de dudosa procedencia, según informó hoy el Gobierno Civil de la provincia.

Las piezas intervenidas son tres bargueños, tres tallas religiosas en madera policromada, otra esculpida en piedra y de estil gótico, tres óleos de grandes dimensiones y una hornacina con pinturas religiosas.

La operación comenzó el pasado fin de semana, cuando los agentes registraron varios domicilios en la provincia y fueron detenidas tres personas.

Por su parte, Víctor Lancha manifestó que lo único que ocurre es que la Administración quiere catalogar y controlar todas las obras de arte y, con eso, "lo que van a conseguir es que los anticuarios nos retiremos".

En su opinión, gracias a ellos las obras de arte hanresucitado y si ahora se pagan grandes cantidades por las piezas es porque "les hemos dado valor". A su juicio, el negocio de las antigüedades "vive malos tiempos", aunque él tiene plena confianza en lo que compra.

Los objetos intervenidos en su tienda han sido depositados en el Museo de Santa Cruz.