Igea cuestionó las razones por las que este adelanto electoral ha dejado a los castellanos y leoneses sin Presupuestos Generales de la Comunidad para 2022 (ahora prorrogados), cuando “son el mejor arma económica”. “¿Lo ha hecho para prometérselo en campaña?”, insistió.

Al respecto, Tudanca criticó que en lugar de “estar en elecciones, Castilla y León debería estar pensando en los fondos europeos”. “Usted nos está dejando atrás”, le espetó, a lo que Mañueco respondió que el Gobierno “margina” a esta comunidad en el reparto de los fondos y con los Presupuestos del Estado. “Sánchez nos ningunea y usted nos traiciona”, se dirigió a Tudanca.

El líder socialista fue el encargado de abrir el tercer bloque del debate, dedicado a la economía, en el que habló de las fortalezas económicas y de una “recuperación que llega potente” en España y Castilla y León, “con un momento decisivo de nuestra historia con la llegada de los fondos”. “En eso debíamos estar; porque están pensados para Castilla y León”, dijo, para enumerar el vehículo eléctrico, las energías renovables, el hidrógeno verde, el idioma y la cultura.

Por ello, anunció que si es elegido presidente convocará a los agentes económicos y sociales para pactar los presupuestos que aprueben los fondos, un plan industrial en los primeros cien días, medidas para “superar los desequilibrios” y diseñar un proyecto propio estratégico para “aprovechar la llegada de fondos europeos”.

También prometió su apoyo a los parques agroalimentarios de Valladolid y Bierzo, Vicolozano en Ávila, la Puerta Noroeste en Benavente, y el centro de FP en Segovia, entre otros. “Este enorme potencial hay que aprovecharlo, pero usted nos está dejando atrás con la convocatoria electoral y el modelo del PP”, incidió.

Por último, en su minuto de posicionamiento recordó que “hay muchas crisis y solo dos maneras de salir de ellas, con recortes o recuperación justa”, y afeó que el PP votara en contra de la reforma laboral la semana pasada, que consolida el contrato indefinido y que fue respaldado por Ciudadanos también.

Coincidió Mañueco en que “hay dos modelos”, si bien el candidato del PP se refirió al que “ataca la automoción, la carne, azúcar y margina a Castilla y León en los fondos europeos”, algo que se encontró con la respuesta del líder socialista, quien le mostró un documento en el que aseguraba que de las seis comunidades que más han recibido, cuatro eran gobernadas por el Partido Popular.

Mañueco criticó que Pedro Sánchez es sinónimo de subida de los precios de la luz, los combustibles y el IPC, lo que “inhabilita a Tudanca para hablar de economía”, y lo contrapuso a sus propuestas: “Mi gobierno baja impuestos, ayuda a autónomos, da facilidades, crea planes industriales. Sabemos lo que hay que hacer y tenemos un proyecto. Quiero seguir liderando la transformación de Castilla y León para crecer y hacer crecer España”, ensalzó, para recordar que el voto positivo de PSOE y Cs en la reforma laboral en el Congreso “parece que les acerca más de lo que pensamos”.

Al respecto, Igea le pidió a Mañueco que hablara de cuestiones “de Castilla y León” cuando citó la luz y los combustibles y Tudanca le afeó que este bloque “se lo ha escrito Pablo Casado”. A esto, el candidato del PP respondió que la Junta ha dedicado 465 millones en ayudas directas y 900 en financiación y “nunca tantos acuerdos en tan poco tiempo en el Diálogo Social”, a lo que Tudanca le acusó de “incumplirlos”.

Por su parte, Igea agradeció a Mañueco que hoy prometiera casi 10.000 euros para los que creen empleo, frente a los 6.000 del último debate, y apeló a la necesidad de “salir de esta crisis con políticas liberales y de crecimiento, para lo que comprometió una ley de Mercado Abierto y bajar un 50 por ciento el tramo autonómico del IRPF.

Acusó a Mañueco de prometer “bajar los impuestos con frecuencia, pero solo lo cumplen cuando está Ciudadanos en el Gobierno”. “Si quieren asegurarse de que baja la fiscalidad, no voten a quien lo promete, sino a quien lo hace posible”, concluyó, para aconsejar al dirigente del PP de que no cite tanto a Pedro Sánchez, porque “cada vez que lo dice se le oye más bajito”, una frase que motivó una cierta discusión.