La compañía ha fijado en 7 euros por acción el precio máximo en el que se estrenará en el parqué, con lo que se llega al nivel más alto del rango inicialmente previsto, que oscilaba entre 5,3 y 7 euros.

Este será el precio que, como máximo, pagarán los inversores en el tramo minorista y para empleados de la oferta por cada acción de Iberdrola Renovables que les sea adjudicada.

La demanda de la Oferta Pública de Suscripción (OPS) de acciones de Iberdrola Renovables asciende, según los últimos datos, a 3,2 veces el número de títulos inicialmente asignados al tramo minorista y para empleados.

Por su parte, la demanda del tramo español para inversores cualificados asciende a 3,3 veces el número de títulos inicialmente asignados al mismo.

Por lo que respecta al tramo internacional, se encuentra en pleno periodo de prospección de la demanda, por lo que resulta prematuro ofrecer datos sobre su evolución.

Iberdrola pretende sacar al mercado el 20% de su filial, esto es, un total de 844.812.980 acciones. Estas cifras suponen valorar la compañía en un máximo de 29.568 millones de euros.

El objetivo de Iberdrola Renovables es instalar 2.000 megavatios (MW) al año hasta 2010, para alcanzar en esa fecha los 13.600 MW.

Actualmente tiene 7.342 MW instalados y 1.375 MW en construcción. El 60% de su potencia instalada se ubica en España, el 28% en Estados Unidos, el 5% en Reino Unido (tras la compra de Scottish Power) y el 7% en otros países. Para 2015, espera llegar a los 140.000 MW de capacidad instalada en España, Estados Unidos y Reino Unido.

Además, la filial prevé un 20-25% de "pay out", empezando en 2008. De este modo, augura que el beneficio obtenido que la empresa dedicará al pago de dividendos alcanzará el citado porcentaje (20-25%).

En los nueve primeros meses de 2007, Iberdrola Renovables alcanzó un beneficio neto de 83 millones de euros, un Ebitda de 564 millones de euros (el 86% atribuible a la energía eólica) y unos ingresos de 1.122 millones de euros.