Así lo comentó en un encuentro empresarial organizado por la patronal española CEOE en el que explicó que, conforme los indicadores de liquidez de las entidades “sean un poco menos holgados, en ese momento” se producirán estrategias de remuneración de los depósitos más generalizadas que pagarán por las aportaciones a planes de pensiones o fondos y también por los depósitos bancarios.

En el caso de Ibercaja, puso en valor que “desde el primer momento” retribuye el ahorro en muchos productos, aunque “otra cosa es que lo hagamos en unos productos y no en otros”.

Iglesias hizo referencia a la situación macroeconómica para anticipar que el crecimiento “va a perder todavía algo más de ritmo en los próximos trimestres”, aunque no habría recesión, y esa “languidez” de la economía “puede durar una buena temporada”. Consideró que el ritmo de crecimiento puede no superar el 1,5% durante los próximos dos años.

La inflación y la subida de los tipos de interés “va a ir mermando poco a poco la capacidad de gasto de las familias” y las empresas se verán “claramente” afectadas en los próximos trimestres “si se mantiene la presión en costes financieros, operativos y laborales” como se prevé. El encarecimiento de la financiación “se va a ir trasladando al precio del crédito para empresas y particulares”, avisó Iglesias.

Preguntado sobre las adhesiones a los códigos de buenas prácticas para hipotecados vulnerables y en riesgo de serlo, señaló que de momento hay “poca demanda” pero que “se acelerará en los próximos meses” conforme se vayan actualizando las cuotas con la subida del euríbor. No obstante, apuntó que será “un porcentaje mínimo” el que recurra a las medidas de los códigos pactadas entre el Gobierno y las patronales bancarias.

Sobre los tipos de interés, descartó que vuelvan a terreno negativo o un nivel muy bajo e indicó que se moverán entre el 2% y el 3% en el corto plazo.

Respecto a la situación del sector bancario español tras las tensiones financieras, el consejero delegado de Ibercaja pronosticó que la crisis “va a ser mucho menos severa que la de 2008” y en el caso de que algún banco más se viera afectado, dijo que será “muy probablemente” en Estados Unidos.

Diferenció el modelo norteamericano del europeo y el español, centrado en la banca minorista. “El sector bancario española es mucho más robusto y resiliente que en 2008, no vamos a sufrir racionamiento de la financiación bancaria, contamos con holgura en solvencia y liquidez”, aseveró.

Preguntado sobre si Ibercaja podrá aguantar la coyuntura en solitario, afirmó que sí y lo justificó en que cada vez tiene “indicadores más potentes” de solvencia y liquidez y tiene “una resiliencia mayor que otros”. Sobre el fondo de reserva que está dotando alternativo a la salida a Bolsa, indicó que el ritmo es de 100 millones al año, que ya cuenta con la mitad del montante de los 316 millones y “en año y medio estará completo”.