Aguirre explicó hoy la primera fase de este plan, que afectará a la mejora de las Humanidades en la Educación Secundaria Obligatoria (ESO). El Gobierno ha considerado necesario empezar por las Humnidades que estudian los jóvenes de entre 12 y 16 años, porque es el periodo crítico que determina un buen o mal aprendizaje.

El Ejecutivo quiere aprobar a finales de año una segunda fase del plan, que afectaría a una modificación similar para la enseñanza de Humanidades en el Bachillerato. En la primavera próxima se culminaría el proyecto con una tercera etapa para la Educación Primaria. El deseo de los responsables de Educación es que todo el plan esté ultimado antes del verano para su previsible apicación el próximo curso.

En la materia de Geografía e Historia, el Gobierno pretende que se preste una mayor dedicación a la Historia de Europa, la Historia Universal y de España, así como reforzar el estudio cronológico de los periodos históricos. "La cronología es el esqueleto de la Historia", afirmó Aguirre.

En lengua castellana y literatura, el propósito es acentuar el rigor en el aprendizaje y uso correcto del lenguaje oral y escrito, así como potenciar el estudio de la Historia y de la Litratura Universal.

"Buscamos una mayor definición de los contenidos, porque ahora hay una cierta indefinición. No se quita de una materia para poner a otra", explicó.

La ministra fue categórica cuando se le preguntó si la reforma conllevará un mayor número de horas lectivas para los alumnos: "Rotundamente no. El horario escolar se mantiene intocable".

CONSENSUADO

La titular de Educación aseguró que el Ejecutivo considera este plan como "una medida fundamental para la mejora de la calidad dela enseñanza en España", y por eso estaba recogido como un compromiso en el último programa electoral del PP.

Según Aguirre, el plan no lo va a "imponer" el Gobierno, porque es fruto de las aportaciones que han hecho un grupo de expertos, académicos y profesores tras el "clamor generalizado" de la comunidad educativa, en el sentido de que era necesario mejorar la calidad de la enseñanza de Humanidades en España.

Tras la presentación hoy a los medios de comunicación, el Gobierno enviará el anteproecto de la reforma relativa a las Humanidades en la ESO al Consejo Escolar y al Consejo de Estado, para que emitan sus correspondientes dictámenes como paso previo a la aprobación definitiva por el Consejo de Ministros.

También será remitido a las comunidades autónomas para que emitan su opinión, aunque Esperanza Aguirre dejó claro desde el comienzo de la rueda de prensa que la reforma será vía real decreto y afectará a las "enseñanzas mínimas" para todos los españoles (una competencia exclusiva del Gbierno, según prevé la LOGSE) y no a los planes de estudio o al currículo, que compete a las comunidades.

El Gobierno no quiere limitarse a la mejora de las Humanidades, y también prevé revisar la enseñanza de las ciencias, indicó Aguirre. Asimismo, la ministra confirmó que su departamento estudia ampliar la enseñanza de inglés no sólo al primer curso de Primaria, sino a la educación infantil.

En la comisión de expertos que ha asesorado al Gobierno han estado personalidades como el secretario de a Real Academia Española, Víctor García de la Concha, y el catedrático Antonio Alvar.