Según informaron fuentes del comité organizador, este acuerdo se alcanzó ayer en Berlín, pocas horas antes de presentar un nuevo informe de progreso ante el Comité Ejecutivo del Comité Olímpico Internacional.

El presidente delmáximo organismo olímpico, Juan Antonio Samaranch, mostró su satisfacción por esta noticia y aseguró que esta medida "ofrecerá precios más al alcance de la familia olímpica y mejorará la imagen de futuro de la ciudad".

El nuevo informe de progreso del COOB recogió como aspecto más destacado la evaluación de las pruebas test, celebradas a lo largo del verano en las instalaciones olímpicas a modo de ensayo con vistas a los Juegos Olímpicos del 92.

Durante estas competiciones se cursaron 16.982 acreitaciones, se movilizaron 4.500 voluntarios, se sirvieron 35.000 comidas, 250.000 litros de agua y otros tantos de bebidas embotelladas, se utilizaron 178 vehículos para desplazamientos y 1.151 personas tuvieron a su cargo la asistencia médica.

Para el COOB, la experiencia ha sido más que positiva, ya que ha permitido comprobar "la alta profesionalidad, motivación y cooperación del personal, la validez del modelo de organización diseñado para los Juegos, la conveniencia de los sistemas tecnológicos adptados y el alto grado de sistematización de las instalaciones".

El informe resume también los avances registrados en las obras de infraestructura (apertura de un nuevo tramo del cinturón litoral, de la autovía de los túneles de Vallvidrera y de la autopista Sant-Cugat-Rubí-Terrasa), las incorporaciones efectuadas en el plan de marketing y el estado actual del proceso de venta de entradas.