Quiere garantizar una cobertura sanitaria para todos los habitantes y turistas con ese hospital y llevar a la práctica la universidad, una "maravillosa idea" propuesta por el obispo de Palma de Mallorca y "tirada al traste" por los anteriores concejales de Estepona.

La universidad se ubicaría en un terreno de 3.000 hectreas donado por la familia Nadal Guerrero y sobre el cual actúa como albacea el actual obispo de la Diócesis de Baleares (que con anterioridad desarrolló su labor pastoral en Málaga), Teodoro Ubeda.

"Este hombre (el obispo), como no es gestor, solamente tuvo una grandísima idea y la ineptitud de las anteriores corporaciones y de los gestores urbanísticos, han creado una deuda grandísima al pueblo y han tirado al traste el proyecto", señala Gil Marín. "Era algo que quería todo el pueblo, y nosotros lo amos a desempolvar y lo vamos a hacer realidad".

Gil Marín manifiesta que su padre "es un ser irrepetible" y que le encantaría "poder hacer todas las cosas que él ha sido capaz de hacer", indicó que sus planes más urgentes para Estepona se refieren a la sanidad, el turismo, la cultura y la enseñanza.

El jeque árabe Mohamed Asmawi ha regalado al nuevo alcalde de la localidad malagueña de Estepona, Jesús Gil Marín, hijo del presidente del Atlético de Madrid, una limusina de gran tamaño para trasladr a los turistas del aeropuerto al municipio.

"Caben 14 ó 15 personas. Lleva televisión, lleva bar, lleva de todo", explicó. "Como los árabes saben que a Estepona va a venir gente importante, el primer regalo que me han hecho es el vehículo para traerlos del aeropuerto a aquí".

APOYADO POR GENTE DE DINERO

Para Gil Marín, que ha conseguido 12 de las 21 concejalías del Ayuntamiento esteponero, este obsequio es "un gesto muy importante del mundo árabe y representa mucho para el futuro de Estepona" de la que dijo que será una "Costa del Sol con carácter internacional".

Tras explicar que ha sido apoyado permanentemente "por mucha gente de dinero" de otros países, como Alemania, Francia e Inglaterra, Gil Marín dijo estar "tremendamente encantado" por su victoria electoral del pasado domingo.

Explicó que se presentó a la Alcaldía de Estepona por "desafío profesional" y por la ilusión mostrada por algunos vecinos del municipio, y agregó que los esteponeros se han volcado en su candidatura porqe han visto "alegría, juventud y ganas de trabajar".

El nuevo edil de Estepona dijo que se plantea la alcaldía como una empresa, por lo que se mostró convencido de que si se emplean los parámetros del marketing, "el producto Estepona va a tener un nombre dentro del mercado en muy poco tiempo, que la va hacer muy competitiva".

Declaró que la gestión que hará en el Ayuntamiento se parecerá "en lo bueno" a la de su padre, Jesús Gil y Gil, alcalde de Marbella. "Intentaré coger las cosas buenas y elimnar las cosas que no parecen tan buenas", dijo.

En este sentido, señaló que "todo ser humano se equivoca, sobre todo si es una persona que toma muchas decisiones al cabo del día". "Hay cuestiones que yo hubiera hecho de otra manera, porque mi talante es distinto, pero al final lo que un pueblo te reconoce es el balance, si ha sido positivo o negativo. Y en el caso de mi padre, los resultados avalan de forma aplastante su gestión", agregó.