Hacienda incautó esa cuenta corriente, situación en la que seguía a mediados de este mes, amparándose en qu la hija de la pensionista es cotitular del depósito bancario, ya que como tal la hizo figurar su madre al abrir la cuenta corriente en la sucursal que Caja Madrid tiene en la calle Embajadores, número 48, según explicó a Servimedia el abogado de la primera.

La Agencia reclama a la hija de Tomasa Alvarez una deuda tributaria por el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales correspondiente a la compra de un piso que era propiedad de su madre, y que Hacienda juzga que fue infravalorado en la declaración fscal.

Tomasa Alvarez explicó a esta agencia que ella vive en un piso de 40 metros cuadrados en la Travesía de Cabestreros, número 9, en una típica corrala del popular barrio de Lavapiés, y que vendió a su hija otra vivienda de la misma extensión en 1990, por un valor de un millón de pesetas, exactamente la cantidad declarada a Hacienda.

En consecuencia, su hija pagó 60.000 pesetas en el Impuesto de Transmisiones Jurídicas (el correspondiente 6 por ciento sobre el precio pagado por el piso), pero acienda lo valoró en cinco millones de pesetas y exigió además el pago del Impuesto de Donaciones por los cuatro millones restantes.

A principios de 1995, tras varias comunicaciones enviadas a domicilios equivocados, Hacienda le remitió una notificación en la que cifra la deuda tributaria a pagar, incluyendo recargos, en 913.902 pesetas y le informó de que, para comenzar a cobrarla, requisaba en primer lugar las 26.979 pesetas de la declaración de la renta realizada en 1994, que le salió a devolver po esa cantidad.

Días después, le comunicó el embargo de la cuenta corriente de la que es cotitular con su madre, decisión en la que la Agencia Tributaria no ha dado marcha atrás, pese a haber decidido evaluar nuevamente el impuesto que reclama por la compraventa del piso que originó el conflicto, según notificó a la interesada a finales del pasado mes de marzo, tras las reclamaciones presentadas.

"NO HAY DERECHO"

Tomasa Alvarez vive actualmente de la pensión de viudedad, prestación que recibe a ravés de una cuenta corriente distinta a la que le ha sido incautada.

En declaraciones a Servimedia, afirmó que "no hay derecho" a que Hacienda se quede con el dinero de una mujer que vive de su pensión. Recalcó que lo que le ha ocurrido es "una injusticia", especialmente ahora que el inmueble en el que vive, una típica corrala de Lavapiés, está en obras de remodelación, por las que ella, como propietaria, tendrá que pagar 2.400.000 pesetas.

Por otra parte, el presidente de la Asociación Españolade Asesores Fiscales, Juan Carlos Para, manifestó a Servimedia que Hacienda está obligada a dar marcha atrás en un caso como éste, ya que un decreto promulgado el pasado 24 de marzo establece con toda claridad que, en los casos en que hay dos cotitulares de una cuenta corriente, sólo puede requisarse la mitad correspondiente al contribuyente contra el que está actuando la Agencia Tributaria.

El decreto establece textualmente que "cuando el dinero se encuentre depositado en cuentas a nombre de varios ttulares sólo se embargará la parte correspondiente al titular deudor a la Hacienda Pública".

Juan Carlos Para aseguró que esta medida es de sentido común, para evitar situaciones de una injusticia manifiesta como que Hacienda pudiese embargar la cuenta corriente mantenida en común por una pareja que está ahorrando para comprar un piso, o supuestos semejantes.