Las mismas fuentes precisaron que los contribuyentes más retrasados tendrán la posilidad de entregar los impresos por la tarde en los numerosos bancos y cajas de ahorros que abrirán también por la tarde para atender a sus clientes.

Las multas para los contribuyentes con declaraciones a devolver que no se entreguen mañana oscilanentre las 1.000 y las 150.000 pesetas, en función de la cantidad reclamada. Las declaraciones a pagar no entregadas antes de finalizar su plazo de entrega, que concluyó el 20 de junio, están penalizadas con un recargo de demora del 10% en los primeros tres meses y del 50% a partir del cuarto, de acuerdo con lo establecido en la Ley General Tributaria.

Hacienda mantendrá hasta el final de la campaña su teléfono de información (900-333-555), atendido por 400 personas que ya en las dos primeras semanas d la campaña despacharon un 75% más de consultas que en el mismo periodo del pasado año.

La Agencia Trribuaria espera recibir este año 13,3 billones de declaraciones, un 3,6% más que en la campaña anterior. El saldo entre lo ingresado por las positivas y lo pagado por las que resulten a devolver será negativa para Hacienda en 168.800 millones de pesetas.

La principal novedad de esta campaña residen en que deben presentar declaración los parados que superen el mínimo exento de 1,1 millones de pesets, si bien la atención de la Agencia Tributaria se centra en otros colectivos.

A este respecto, la Agencia Tributaria remitió un requerimiento a 200.000 contribuyentes para instarles a hacer la devolución, ante la sospecha de que, por ser titulares de activos opacos o suscepibles de ocultación al Fisco, podían intentar no cumplir esta obligación.